Información y conocimientos son considerados el objeto, la esencia y elemento fundamental de toda nueva creación y producción intelectual y han posibilitado el progreso de las ciencias, tecnologías, artes y culturas. Y como tal constituyen el objeto de protección de los derechos de propiedad intelectual. La creciente relevancia de información y conocimiento ha derivado en las transformaciones actuales en todos los ámbitos de la vida humana, generando una sociedad del conocimiento en que las relaciones económicas están determinados por el valor e impacto de los activos intangibles, bienes inmateriales y capital intelectual. Las consecuencias para el entorno empresarial han sido la creciente importancia de proteger estos activos basados en la información y en el conocimiento, por medio de los derechos de propiedad intelectual, que logran de esta forma agregar valor y generar una ventaja competitiva para su titular.